«Hace algunos años, mi padre tuvo la idea de escribir un cuento sobre las personas que tienen Síndrome de Asperger, y me propuso hacer las ilustraciones del libro. En primer lugar, lo que yo conozco del Síndrome de Asperger es que las personas que lo tienen muestran dificultad para sociabilizarse con los demás; también sé que siempre dicen lo que piensan y no mienten nunca, y eso no se puede considerar como un defecto, más bien como una virtud. Ellos también necesitan tener su espacio para encontrar la tranquilidad, por eso les molestan los ruidos y los gritos, así pues, creo que este comportamiento no es tampoco malo, simplemente diferente. Este libro expresa los pensamientos y las sensaciones de un niño con Síndrome de Asperger; no sé si al final es un cuento, un sueño, un pensamiento o la realidad, pero lo que sí sé es que ha sido escrito con amor, cariño y esperanza». (Amanda Lorenzo).
