El ámbito rural facilita una dinámica social caracterizada por la importancia de lo cotidiano, la cercanía, la reciprocidad y el conocimiento mutuo y por ende, el mayor control de todo lo que cualquier vecino o vecina realiza dentro y fuera de su casa y la valoración que de ello hacen el resto de miembros de la comunidad. Así ocurre en el municipio de Ossa de Montiel (Albacete) donde, además, la parentela es amplia y tiene un peso importante en cuanto a prescripciones normativas no escritas que imponen una serie de compromisos y que supone unas expectativas de comportamiento que si no se cumplen son sancionadas.
En este contexto, las mujeres son especialmente controladas y sancionadas en una categoría de análisis que es la “buena mujer”. De este modo, las mujeres en el proceso de socialización interiorizan los estereotipos y mandatos de género establecidos tradicionalmente para ellas e intentarán cumplir con las expectativas evitando que se generen habladurías o “ruidos” que a la vez de desconsiderarlas las convierten en “malas mujeres”. El análisis que se propone tiene una perspectiva histórica y generacional donde las NUERAS, como parientes políticas y su representación como “buenas mujeres” tienen un especial interés.
Soledad Muñoz Oliver nació en Ossa de Montiel (Albacete) en el año 1973. Hija de Soledad y de Gabriel. Entre 1991 y 1994 estudió en Cuenca la Diplomatura de Trabajo Social y entre 2004 y 2009, por videoconferencia, la Licenciatura de Antropología Social y Cultural gracias a un convenio entre la UCLM y la Universidad Complutense de Madrid. Dado su interés por la Antropología decidió en 2013, e igualmente por videoconferencia, cursar el Máster Universitario de Antropología Aplicada “Entre la Diversidad y la Globalización” que terminó en Octubre de 2014 con la defensa de su Trabajo Fin de Máster fruto del cual surge el libro que se presenta.
Desde los 14 años está vinculada al ámbito de lo social y lo comunitario tanto en lo personal, participando en entidades sin fin de lucro y en labores de voluntariado, como en lo profesional pasando por trabajos con personas mayores, con discapacidad, jóvenes, familias, infancia, colectivos vulnerables, etc. Desde el año 2001 y hasta la actualidad ejerce su labor profesional como Educadora Familiar y Comunitaria en los Servicios Sociales Básicos de un municipio rural de Albacete en la comarca de La Manchuela. Como proyectos más inmediatos tiene la publicación en revistas académicas y el inicio de su Doctorado.
