Cuando somos pequeños tenemos muy claro nuestro futuro. Sabemos qué queremos hacer y qué queremos ser, sabemos hasta qué perro vamos a tener. No sé muy bien en qué momento se va todo a la mierda, si es algo que pasa de repente o si, por el contrario, las certezas infantiles se van cayendo como se caen los dientes de leche. Lo que está claro es que desaparecen y en el espacio que estas ocupaban empiezan a instalarse las dudas, los interrogantes y las incógnitas.
En este libro no encontraréis una sola duda, porque las dudas nunca van solas ¿De dónde sale tanto interrogante? ¿Qué se supone que tengo que hacer con ellos? ¿Los tengo que llevar a algún sitio? ¿Y yo a dónde estaba yendo? A ver, un momento...
Miryam Ayerra Ancín (Pamplona, 1993) es de esas personas que mete el capitalismo en casi cualquier conversación mientras se ríe ella sola mirando su reflejo en una cucharilla. Bióloga y casi socióloga, es un claro ejemplo de que no hay que fiarse de las etiquetas; se le mueren las plantas y a veces entiende más a los perros que a las personas.
Como a casi todo el mundo, se le hace muy raro hablar de sí misma en tercera persona, casi tanto como salir en la solapa de un libro amarillo.