Puede que quieras superar un problema que no resuelves de otro modo, o eres un profesional del bienestar que quieres ampliar tu mirada terapéutica (o ambas cosas).
Entonces quiero advertirte de tres puntos:
1. El abordaje de Integración Psiquedélica Sistémica es una ayuda extremadamente breve que se ha demostrado muy eficaz en trastornos como la depresión, las adiciones, los conflictos relacionales, el vacío existencial… Sin embargo, no se muestra significativamente más eficaz en los problemas psicóticos.
2. No esperes cambiar algo sin asumir el precio de tu pasado y sin jugarte la piel. De esto se deduce que pocos se atreven a cruzar el abismo. En cualquier caso, si estás dispuesto a cruzar, te pueden resultar útil los 7 principios sistémicos que aprendí de una mujer medicina que hacía surf, un sabio del desierto y un nahual.
3. Puede que esta medicina sea para ti o no. No todo sirve para todo el mundo (incluso lo que cuento aquí está considerado por algunos un peligroso método pseudocientífico). Si tienes el coraje de cruzar el abismo te deseo buen camino.
Un día desperté sabiendo que mi vida había cambiado para siempre y que tendría que viajar muy lejos para volver a sentirme como un felino.
De esta búsqueda nace un libro singular sobre el abordaje psiquedélico con la mirada sistémica de las constelaciones familiares, definiendo 7 principios y herramientas que ampliarán los límites terapéuticos.
Si tienes este libro delante es porque tienes una inquietud que te hierve. Eso ya es gran parte del camino. Conserva ese fuego para cruzar el abismo.
No se me ocurrió nada mejor para dejar de ser un inadaptado social que irme junto a mi esposa a vivir a un entorno de naturaleza salvaje en México. Allí crucé el abismo. Entendí que la mayoría de las ayudas prolongan el problema.
Así que ahora ayudo a cruzar el abismo y enseño Integración Psiquedélica Sistémica con Psilocibina (IPSP) a profesionales de la ayuda.
Debes saber que no soy un terapeuta conocido, ni influyente, ni imitado. Mis consultas y talleres los suelo hacer en una cabaña destartalada, junto a un fogón y plantas medicinales que cuelgan del techo.