En guerras y conflictos distintos se vieron envueltos los protagonistas de esta historia.
Abandonaron Cubo del Vino, un pueblecito de la provincia de Zamora, allá por los años cincuenta. Unos viajaron a Santurce, en Vizcaya, donde vivieron años duros y también años de felicidad. Eran tiempos de vivienda con derecho a cocina, de lucha obrera y de atentados de ETA.
El otro protagonista desapareció del pueblo sin dejar rastro alguno. Al cabo de los años, una carta enviada a los padres desde la legión informaba de su fallecimiento. La madre habló con el cura para celebrar durante un año misas por su eterno descanso. Después de muchos años, regresó sano y salvo, pero su mochila llegaba repleta de vivencias y aventuras en una guerra que nunca entendió.
Encarnación Alonso Rodrigo nace en el año 1956 en Cubo del Vino (Zamora).
En este pequeño pueblo pasa su niñez y adolescencia. En 1977, contrae matrimonio y se traslada a Bilbao, donde nacen sus dos hijos. Durante más de cuarenta años fija allí su residencia, coincidiendo con el desmantelamiento industrial y los atentados de ETA, experiencias que relata en su nuevo libro.
En los últimos años que vive en Bilbao se interesa por la literatura, mientras hace cursos de creación literaria con profesorado especializado en talleres de escritura.
En 2016, participa en el certamen literario Literatur Saria, en el que recibe mención especial en la categoría de adultos por la poesía Sus manos, que será publicada en varias revistas.
En 2018, publica Enterraron bajo el agua el sol de nuestras vidas y llega en pocos meses a la tercera edición. Es finalista ese año en los Premios Santutxu y +.
En 2019, publica Las damas de la gran fábrica. El secreto del convento, con el que alcanza en pocos meses la segunda edición.
En la actualidad, su proyecto más inmediato es escribir cuentos para Arrate y Uxue, sus dos nietas gemelas recién nacidas.