Gasiflotes utiliza el lenguaje poético para ofrecernos recursos que nos hagan sentir bien. El lector absorbe el contenido en un formato donde la autoayuda se asimila de otra forma. Es el poder de los versos y de cómo lo empapan todo de musicalidad y magia. Sugiriendo, incitando, tocándonos por dentro.
También hay una obra gráfica, desarrollada por el autor, que intenta distraer la imaginación en la profundidad de los mensajes.
Gasiflotes ofrece así, la fuerza del verbo ilustrada. La fantasía del dibujo para crear la pausa. Es así, como mancha y grafo se convierten en entremeses, mientras gira la tierra y para; que continúe el teatro.