En las páginas de este libro hay mucha Historia, reflejando la azarosa vida del piloto republicano, que perdida la guerra civil e internado en un campo de concentración en Francia, resurge como ave fénix, termina su carrera de medicina y se instala en Tánger, donde continúa expresando su trágico paso por esta Tierra de sus dolores, el amor perdido de Juanita, su esposa y madre de José y de Juan a través de innumerables poemas, llenos de referencias a las heridas del alma. De los entusiasmos a los fracasos, de la formación a la experiencia, desde la esperanza al desengaño, incluyendo el retorno a la esperanza, y nuevo retorno al desengaño. Murió treinta y tres años después en accidente de avioneta, en un Tánger hoy desconocido. Su hijo mayor José Mª realiza un esfuerzo ímprobo por dejar reflejadas las vivencias, infortunios y luchas internas de este intelectual polifacético, que curaba cualquier enfermedad en ese Tánger de posguerra española, heredero de otro internacional y libre durante la Segunda Guerra Mundial.
El texto poético “Imágenes” (1965), escrito en esa tierra de Leyenda, transmite como pocos su desencanto. “Inútil lucha, ¡lástima vana!”, dice José María, “que al nuevo clarear de la mañana la rosa esté sin pétalos de seda”.
Toda poesía, es un intento de confesión, un intento, y a veces un logro, verter al exterior lo que nos pide la libertad en lo íntimo. Es un querer volar del espíritu, utilizando la palabra, la imagen, la evocación y la rima. Inútil vuelo. El autor nunca queda satisfecho.
A este médico, poeta y loco….por la aviación, había que haberlo conocido, pero a falta de ese contacto, aquí está su tremenda historia, contada en formato biográfico.
José Mª Aparici Jerez, Madrid (1948), se trasladó con sus padres a Tánger en 1953. Después del bachillerato en Marruecos, ingresó en la escuela de Pilotos de Complemento de Granada, donde comenzó volando la mítica Buker, en la 21 promoción, en septiembre en 1969 de la que se graduó como sargento en enero de 1971. Ingresó en Iberia en diciembre de 1973 donde actuó como copiloto en diversas flotas.
Como Comandante, ejerció de instructor y jefe de instrucción y finalizó en la flota A-340. Antes de la jubilación en junio de 2008, ocupó durante cinco años la Subdirección de Seguridad de Vuelo de Iberia. Totalizó 17.338 horas de vuelo y recorrió 13.560.000 km.
Además de la formación como piloto, realizó entre otros cursos, el de Formación Gerencial y el de Sistemas de Gestión de la Seguridad Operacional.
Publicó en la revista Mach 82 el articulo Torrejón V/s Barajas. Posteriormente un libro titulado “Guía del piloto de Largo Recorrido” en formato digital.
Como escritor fuera del ámbito profesional, es su única publicación.