Victoria Benito López nace en 1930 en la localidad salmantina de Villarino de los Aires en el seno de una familia de diez hermanos.
Al contrario que a muchas personas de su generación, el cariño de unos padres y unos hermanos siempre atentos han conseguido atenuar la huella de las desgracias y del hambre que trajeron la Guerra Civil y la posguerra.
Como para casi todos nuestros mayores, el trabajo comenzó a muy temprana edad y éste se ha mantenido en todas las etapas de la vida. Trabajo para contribuir a las necesidades domésticas durante la adolescencia, trabajo para, más adelante, sostener a su propia familia y trabajo en la actualidad por mantener la vida con las ilusiones de las pequeñas cosas.
Madre de cinco hijos varones y abuela de ocho nietos, Victoria disfruta ahora de su tiempo en Villarino, el pueblo que la ha acogido de nuevo y donde ha retomado una de sus grandes pasiones: “la poesía, el arte de expresar la vida con bonitas palabras”.