Una cuestión que se ha planteado desde hace ya unos años es si el aumento registrado de casos de abusos sexuales en la infancia corresponde solo a un aumento de denuncias o a un aumento real de ese tipo de sucesos.
Los casos conocidos de abuso sexual a menores y que se denuncian son una pequeña parte de los ocurridos. Así, se denuncian en un porcentaje muy bajo y no todos acaban en condena. En un informe reciente, la organización Save the Children apuntaba que solo el 15% de los casos de abuso sexual se denuncian. Se podría conseguir una aproximación un poco más realista de la criminalidad en este sentido a través de las llamadas fuentes realistas o no oficiales. Estas fuentes de información se obtienen mediante encuestas de victimización o de autoinculpación, y corresponden a casos de criminalidad no denunciados en organismos policiales o judiciales.
Según datos del Ministerio del Interior, se ha registrado un aumento de casos de violencia sexual contra menores perpetrados en las viviendas durante el año 2020, en pandemia por COVID-19. El aumento de casos juzgados en su momento debería traducirse en un repunte posterior de casos en los juzgados.
Este libro recoge un trabajo de divulgación, descriptivo y no de investigación científica.