Conviene que se sepa que este libro no lo ha escrito una junta letras profesional. Ni alguien que quiere ganarse la vida con la literatura. Tampoco se trata de una especialista en gramática, ortografía o sintaxis… ni falta que hace. Estas páginas en las que se van a sumergir a continuación son obra de una persona que ha querido compartir sus vivencias de enferma crónica con todos nosotros. Sin tapujos, desde las tripas maltrechas, a pelo, sin muchos adjetivos y sí muchas palabras que suenan a verdad, a sufrimiento, a lucha y, sobre todo, a amor por la vida.
La albaceteña Rosa Sirvent es un alma castigada y pura, hecha de cristal y acero. Su azaroso deambular vital está en estas líneas, impregna cada letra y nos demuestra, en cada uno de sus párrafos, que querer –vivir- es poder –vivir-.
Este “Título del libro” no significará un antes y después en la vida de Rosa, pero es muy posible que ayude a otros, usted y yo, a entender que hay vida tras, y durante, la enfermedad –sea cual fuere su naturaleza- y que lo único importante de verdad, y al fin y al cabo, es que todos luchemos, día y noche, por alcanzar la felicidad crónica.
Rosa Sirvent Muñoz nació en Albacete en 1958. Se inició en la literatura por motivos ajenos a su voluntad, inspirándose en hechos reales, en la mayoría de los cuales es protagonista.
Con este relato la autora pretende dar a conocer, en tono de tragicomedia, las tribulaciones que fue sorteando desde que comenzó su enfermedad crónica y el funcionamiento de la sanidad española para, de esta manera, poder ayudar a otros que, como ella, se encuentren en estas disparatadas situaciones.
Realizó estudios de Derecho y en su tiempo libre se dedica a la pintura (vocación que descubrió tardíamente), contando con más de cien obras en su haber.
Ha participado en varias exposiciones colectivas, tres de ellas en Madrid.
