En la sociedad posmoderna es un hecho que “a la ciencia no se le puede cerrar la puerta”. Los avances de la técnica han posibilitado la inversión de la relación del sujeto con el objeto. Si antes el sujeto utilizaba el método científico para aumentar su saber, en la actualidad con frecuencia se toma al sujeto como objeto de la ciencia. Se hacen intervenciones sobre los cuerpos humanos simplemente porque es posible hacerlas técnicamente. Sin embargo, es necesario preguntarse si son pertinentes.
Dentro del ámbito sanitario cada vez es más frecuente encontrar que el paciente ya no solicita al médico su consejo o su conocimiento para curarse sino que acude a él para demandar el tratamiento que ha decidido que debe recibir, incluso por derecho propio.
En este sentido los avances de la ciencia por una parte, y la demanda sin límite del paciente por otro, condicionan cada vez más la labor de los profesionales sanitarios. En este marco se puede adormecer la conciencia del profesional y comprometer seriamente los límites de la subjetividad humana.
La bioética y la deontología, como disciplinas transversales a cualquier especialidad sanitaria, constituyen las herramientas para analizar los límites morales de la ciencia.
La presente Colección de Estudios sobre Ética para Profesionales Sanitarios pretende abordar diversas situaciones clínicas que producen de manera cotidiana dilemas morales a los profesionales sanitarios que no son fáciles de discernir. Esta obra representa un esfuerzo teórico en el que articular conceptos a partir de distintos interrogantes que han ido surgiendo en la práctica clínica.
La complejidad del escenario clínico no sólo implica al médico y su paciente, sino a todos los profesionales sanitarios, y supone todavía un reto que necesita ser asumido no sólo en la práctica profesional diaria sino también en la formación de los profesionales sanitarios del futuro.
Ana González Arévalo, Francisco M. Rodríguez-Peña y Marta Herrera Durán.
